Soltando amarras
Siempre, desde que llegue a trabajar en este lugar, supe exactamente el instante en que el que me tendría que ir…… no hay plazo que no se cumpla. Han sido ya poco más de cinco años..... desde inicios de 2019, en los que he transitado en uno de los lugares más peligrosos de mi querida ciudad, un lugar que aparenta ser agreste y ríspido, en el que circulan extraños mal encarados todos los días. He buscado en mi memoria, (que ya no es muy buena) si acaso instantes de otro periodo de mi vida en los que las cosas hayan sido así, tan de la chingada y no lo recuerdo... vienen a mi mente mis años de chavala haciendo babosada y media, mi tiempo en familia con escasez de dinero y trabajo, mis crisis de identidad, la muerte de mi madre y nada hay que superé este… Su chingada madre… santas putizas batman… ya no soy amiga del espejo, pero hay veces en los que en mi prisa por aplicarme mi crema y bloqueador, observó que una extraña con ligero sobrepeso me mira… la recuerdo de antaño con diez